Hola! Hoy les quiero contar un poco acerca de los diamantes de laboratorio y tratar de quitarles el estigma que traen encima.
Les explico…
Los diamantes de laboratorio son gemas creadas mediante procesos científicos y tecnológicos en cámaras de crecimiento y que, a nivel molecular, químico, físico, color, refacción de la luz son iguales a los diamantes naturales.
La única diferencia es que uno está creado por la naturaleza y el otro por el hombre. Por lo que óptica y anatómicamente hablando, no hay diferencia alguna, ambos son 100% reales.
Entonces, ¿por qué hay gente que prefiere unos u otros?
Trataré de explicar todo en simple para no ponerme latera (☺) Los diamantes naturales se crean bajo la superficie de la tierra y es casi un “milagro” de la naturaleza que se den las condiciones de temperatura extremas y presión necesaria para que luego de miles de años se forme un diamante. Y luego se necesita otro “milagro” para poder extraer un diamante, ya que deben pasar otros miles de años más hasta que de forma casi fortuita aparezcan en algún punto cercano a la superficie.
Es tan complejo que “exista” un diamante natural, es un proceso tan único y difícil de que ocurra, que los posiciona como las piedras preciosas más preciadas del mundo. De ahí viene su asociación con la exclusividad o lujo, y por eso es que son tan caros.
Pero claro, hay mucha gente que se opone a la extracción y explotación en minas de diamantes, principalmente por temas de contaminación y de ahí viene el apodo de los diamantes de laboratorio o ecológicos.
Los diamantes de laboratorios, al no implicar minas de extracción, son definitivamente más ecológicos, y como se crean en un tiempo infinitamente más rápido que los naturales es que su valor es más barato.
Es por es que un diamante de laboratorio de 1 kilate es más barato que un diamante natural del mismo kilate. Estrictamente por el tiempo de creación.
Entonces…¿Por qué existe resistencia a los diamantes de laboratorios?
Porque todo lo nuevo asusta y esto es una innovación rupturista que vino a mover el cómo se comercializaban los diamantes desde que el mundo es mundo, y se teme a la democratización de esta piedra y lo que simboliza (status, exclusividad).
Pero tal como les comenté! Yo amo ambas alternativas de diamantes….pero cuando me preguntan que me recomiendas?
Siempre respondo que es una cuestión de preferencia personal. Si eres de esas personas que valoran los procesos naturales, rareza de la creación y la historia detrás de un diamante natural, ésta es definitivamente tu opción. Pero si buscas tener una piedra igualmente bella pero de mayor tamaño y mejor precio, los diamantes de laboratorio serían la opción más atractiva.
¿Qué opinan? Las leo.